pertenecer

 
 

¿hay que pertenecer a una iglesia para ser salvo?

Por David Vaughn Elliott

Frecuentemente se oye la idea de que ninguna iglesia puede salvar al hombre; que es sólo Cristo quien salva. Hay muchos que opinan que es mejor no pertenecer a ninguna iglesia, sino sólo estudiar la Biblia individualmente. Pero otros dudan de tales actitudes. Ellos sinceramente hacen la pregunta: "¿Es necesario pertenecer a una iglesia para ser salvo?" ¿Qué dice la Biblia de todo esto? ¿Es requisito congregarse?

Hay que entender cuál es la relación entre Cristo y la iglesia. Cristo afirmó que El es el Dueño y el Fundador de la iglesia. Dijo: "Edificaré mi iglesia" (Mateo 16:18). Cuando Cristo Jesús anduvo en este mundo, lo hizo en un cuerpo humano. Pero desde entonces, Cristo tiene también otro cuerpo: "la iglesia, la cual es su cuerpo" (Efesios 1:22-23). Los mismos versículos declaran que Cristo es la cabeza de la iglesia. Nosotros sabemos que Jesús murió por los pecados de todo el mundo. Pero declara la Biblia también que Cristo murió por la iglesia, que El ama a la iglesia y que El purifica a la iglesia (Efesios 5:25-27).

Según las Escrituras, se puede decir que pertenecer a Cristo es pertenecer a su iglesia, y que pertenecer a la iglesia de Cristo es pertenecer a Cristo. De la manera que es fatal separar la cabeza del cuerpo de un hombre (decapitarlo), así también es fatal separar a Cristo de su iglesia. Decir que no se necesita a la iglesia es decir que no se necesita a Cristo. Decir que se salva sin la iglesia, es decir que se salva sin Cristo.

Es cierto que la iglesia en sí no salva. Pero sí, la iglesia de Cristo es su propio cuerpo, donde están todos los que se han salvado por su sangre. Cuando los apóstoles predicaban y las personas se salvaban, siempre formaban un grupo, es decir, una iglesia. Véase, por ejemplo, Hechos 14:21-23. El bautismo no sólo nos salva (Hechos 2:38) sino que también nos añade al mismo cuerpo de Cristo (1·Corintios 12:13). El capítulo 12 entero habla de la necesidad que tienen los cristianos de trabajar juntos, ayudándose los unos a los otros.

No basta simplemente "pertenecer" a la iglesia. Hay que congregarse con los hermanos para glorificar a Dios y para animarse los unos a los otros. Dice Hebreos 10:25: "No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos". Como un pedazo de leña sacado del fuego se apaga, así también un cristiano que no se congrega se enfría y se muere.

Sí, hay que pertenecer a una iglesia para ser salvo, pero no a cualquier iglesia. Las sectas no son de Cristo ni se encuentran en la Biblia. La iglesia verdadera es de Cristo Jesús. La iglesia de El lleva su nombre y no tiene sede aquí en este mundo. Esperamos que este estudio le sirva de estímulo para estudiar más la Biblia y descubrir la verdad sobre la iglesia de Cristo Jesús.