VoluntadDeDios

 
 

Insight #351 – El Calvinismo Examinado # 3 – La Voluntad de Dios – Romanos 9

Por David Vaughn Elliott


¿Enseña Romanos 9 la elección incondicional para la salvación? Primero debemos entender el contexto. Recordemos que esta carta no fue escrita a una iglesia moderna compuesta únicamente de gentiles. Una gran parte del libro de Romanos contrarresta la mentalidad equivocada de los judíos que rechazaban la idea de que los gentiles podrían salvarse por medio de Cristo. Creían que solo los descendientes de Abraham eran el pueblo de Dios.

I. Dios Elige a Quien Quiere

Después de expresar su gran amor por sus parientes físicos (Romanos 9:1-5), en los versículos 6-13 Pablo les recuerda que no todos los descendientes de Abraham eran el pueblo de Dios. Ismael y Esaú no fueron escogidos. Isaac y Jacob (Israel) sí fueron escogidos. Estos ejemplos demuestran que “no son los hijos de la carne los que son hijos de Dios, sino que los hijos de la promesa”. Ningún judío podía negar esto.

La elección de Jacob sobre Esaú cuando “aún los mellizos no habían nacido…” y “el propósito de Dios conforme a Su elección... [etc.]” no se refiere a la salvación eterna personal. Dios le había dicho a Rebeca que “dos naciones hay en tu seno…” (Génesis 25:23). ¡Naciones! En Romanos 9:13, Pablo cita parte de Malaquías 1:1-4, un texto que habla claramente de las naciones de Esaú (Edom) y Jacob (Israel). En resumen, en Romanos 9:6-13 Pablo recuerda a sus compatriotas judíos que su nación había sido el pueblo elegido de Dios porque Dios quiso que así fuera.

II. Dios Hace Lo Que Quiere

Para enfatizar aún más la voluntad de Dios, en Romanos 9:14-21 Pablo usa los ejemplos de Faraón y un alfarero para recalcar que Dios “tiene misericordia, del que quiere y al que quiere endurece”. Dios usó a Faraón para traer gloria a Sí mismo. Cualquier judío sabía que Faraón había sido obstinado desde el principio, y detrás de todo esto estaba la voluntad y el deseo de Dios de liberar a Israel de la esclavitud.

Pablo habla entonces de un alfarero, un claro ejemplo de que Dios hace lo que quiere. “¿O no tiene el alfarero derecho sobre el barro de hacer de la misma masa un vaso para uso honorable y otro para uso ordinario?” (9:21). Observe que el texto no dice que la voluntad de Dios (el alfarero) sea incondicional como en “la elección incondicional”. Dios es soberano, puede elegir incondicionalmente o con condiciones. En la analogía del alfarero que se ve en Jeremías 18:1-10, queda claro que la manera en que Dios trata al barro se basa condicionalmente en el comportamiento de la nación: “Si esa nación… se vuelve de su maldad…” Sí, Dios elige a quien quiere elegir, pero a menudo elige imponer condiciones y, en Su soberanía, decide permitir que el hombre elija.

III. ¿Qué Quiere Dios Hoy Día?

Romanos 9:6-21 no se trata de la salvación eterna personal, ¡pero los versículos 22-32 sí! Debemos considerar la primera parte de Romanos 9 junto con la última, o perderemos el punto principal. En Romanos 9:6-21, Pablo usa ejemplos terrenales, nacionales y temporales (que los judíos conocían bien) para enfatizar la verdad de que Dios puede hacer lo que Él quiera hacer. Luego, en los versículos 22-32, Pablo aplica esa verdad al tema de la salvación eterna individual. El punto principal de Romanos 9 es que ser judío por nacimiento o por religión ya no hace que una persona sea elegida por Dios. Ahora que Jesús ha venido al mundo (a través de los judíos), es la voluntad de Dios salvar tanto a los judíos como a los gentiles, si ponen su fe en Jesucristo.

En Romanos 9:24-32, Pablo enfatiza el punto de que Dios ha “llamado, no sólo de los judíos, sino también de los gentiles... para que los gentiles... alcanzaran la justicia... pero Israel... no... ¿Por qué? Porque no la buscaron por fe”. Lejos de tratarse de una elección incondicional, Romanos 9 enseña lo contrario: que hoy la condición de la salvación es la fe en Jesucristo. Todo Romanos 9 es una defensa ampliada (dirigida a los judíos) de la proposición básica de Pablo en el comienzo de la carta: “Porque no me avergüenzo del evangelio, pues es el poder de Dios para la salvación de todo el que cree, del judío primeramente y también del griego” (1:16).

Romanos 9 en Pocas Palabras

Vamos a parafrasear Romanos 9: “Escucha, hermano judío, a quien amo profundamente. Hace siglos, Dios por Su voluntad les escogió como Su pueblo elegido. Pero ahora que Cristo ha venido al mundo a través de ustedes, y Dios elige, escoge, y tiene misericordia de aquellos que creen en Cristo, ya sean judíos o gentiles. ¿Quién eres tú para discutir con Dios?”

–––––––––––

NOTA: El propósito de esta serie es examinar bíblicamente varios aspectos de los cinco puntos del calvinismo: Depravación total, Elección incondicional, Expiación limitada, Gracia irresistible, y Perseverancia de los santos.  

Escrituras tomadas de la Nueva Biblia de las Américas (NBLA), Copyright © 2005 por The Lockman Foundation. Usadas con permiso. www.NuevaBiblia.com